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La comida es, incluidos los postres, una ocasión para disfrutar, para compartir y obviamente para alimentarse. Estudié ingeniería de alimentos y cuando terminé mis estudios, tenía claro que no quería utilizar toda la serie de aditivos y conservantes que había conocido y mucho menos trabajar para producir algo que no cumpliera la promesa que tiene en su esencia los alimentos: alimentar.
Esa es la razón que me motivó a inclinarme por la cocina y más específicamente por el fascinante mundo de la pastelería pero elaborada de una forma natural y sobre pedido, para que los sabores frescos y plenos de sus ingredientes lleguen así a sus celebraciones.
Esa es mi filosofía, así pienso mis productos. Espero que los disfruten

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